Para comprender mejor cómo el Bitcoin afecta el medio ambiente, y en general cómo termina influyendo en el cambio climático, vamos a considerar los siguientes conceptos básicos:
- Estructura básica del Bitcoin.
El Bitcoin es una moneda virtual usada para el pago de intercambios de dinero y de bienes entre sus usuarios, con numerosas ventajas sobre los sistemas de pago tradicionales que utilizan medios físicos, como billetes o monedas, en sus transacciones. Bitcoin funciona de forma descentralizada fuera del control de cualquier gobierno o entidad financiera alguna, como sucede con el Euro o el Dólar.
- Funcionamiento del Bitcoin.
Se basa en una inmensa base de datos formada por nodos repartidos por todo el mundo en numerosas computadoras llamadas servidores, las cuales contienen copias de todas las transacciones que hayan sido realizadas, actualizadas permanentemente por personas conocidas como mineros y que forman parte de los nodos.
- Crecimiento acelerado de los Bitcoins.
Durante los primeros tiempos de la implantación del Bitcoin la actualización de la información compuesta por cadenas de bloques se efectuaba de forma muy rápida y con una cantidad de servidores relativamente pequeña; esto implicaba un consumo de energía eléctrica muy bajo, pero a medida que el Bitcon se fue popularizando, la demanda creció exponencialmente y por su puesto a medida que el valor del Bitcoin aumenta, resolver sus algoritmos se torna cada vez más difícil requiriendo de computadoras más potentes.
- Consumo de energía eléctrica estimado.
El consumo de energía de las computadoras involucradas en el proceso de actualización de las transacciones del Bitcoin son muy variadas; una verdadera cifra podría ser imposible de calcular debido a la característica anónima propia del Bitcoin. Sin embargo, considerando que los mineros están utilizando servidores muy eficientes, la cantidad de electricidad usada estaría en el orden de 13 teravatios por hora, equivalentes al consumo de todo un país como Irlanda.
- Impacto sobre el medio ambiente.
El problema del consumo está empeorando, se estima que la cantidad de energía consumida por Bitcoin aumentó considerablemente en las últimas semanas de 2017. Teniendo en cuenta que una cantidad no menor del 60 por ciento de la potencia de procesamiento de extracción de bitcoins está localizada en China, donde la generación de energía eléctrica en gran medida se obtiene del carbón como combustible y el cual produce CO2, es considerado como uno de los responsables de ocasionar el calentamiento global.
En resumen, la cantidad estimada de electricidad usada por la creación de bitcoins varía mucho. Analistas especializados consideran que de usarse el Bitcoin a escala global, gran parte del consumo eléctrico utilizado sería generado por combustibles fósiles, locura que terminaría matando el planeta.